Con experiencia en televisión (Canal 24h -España-, tester en Red 2000 de Digital + del programa de videojuegos -España-), radio (redactor de Onda Cero -España-, locutor de Celular Millenium -México-, colaborador especializado en Economía de Radio Latina -Argentina-) y prensa (La Gaceta de los negocios, Sportartillero.com, GolandGoal.es), entre otros desempeños, este joven madrileño se pone por primera vez al frente de un espacio televisivo y delante de las cámaras. Un nuevo reto en su recién comenzada carrera profesional. Desde su infancia le es fiel al mundo de las consolas, pero se declara amante de la generación de la Snes.  En parte por la nostalgia, y por otro lado por los retos que suponían antes de la irrupción de Internet.

Para los que queráis saber más sobre él, el equipo de "Game Test Station" le sometió a un amistoso tercer grado:

GTS: ¿Por qué aventurarse en un programa de videojuegos cuándo queda algo lejos de sus anteriores desempeños en Cultura, Deporte y Economía?
 

JP:  Es una idea que me agradaba desde hace tiempo y ahora parece un buen momento. Si bien, la idea de un programa de esta índole viene muy acorde para intentar ocupar un vacío existente en la programación nacional. El trabajo no tiene porqué ser aburrido. ¡Ojo! No quiere decir que no disfrute hablando de Economía o Deporte, sino que los videojuegos me dan la oportunidad de sacar mi imaginación a relucir, tratar de entretener de una forma alternativa y sin complejos delante de la cámara.



GTS: ¿Cuál fue el primer juego que recuerdas haber jugado?
 

JP:  Creo que un título de la Nes muy conocido por todos, Zelda: A link to the past. Era tan pequeño que nunca conseguía avanzar del cuarto mapa y encima el inglés no era mi fuerte en aquel momento, y no termina de serlo del todo en este momento, pero me sirve para defenderme bastante bien.
 

GTS: ¿Qué título fue el primero que acabaste?
 

JP:  Si la memoria no me falla, Ilusion of Time (Ilusion of Gaya). Era de la Nes y creo recordar que el primer juego que llegó traducido íntegramente al español. Una pasada de título.
 

GTS: ¿Se convirtió en tu preferido?
 

JP:  Para nada, pero sí que guardo un buen recuerdo de él. De aquella generación, Sonic 3 y Sonic & Knuckles, Super Mario 3, Súper Mario World, ISS Deluxe, Mega Man X y Pilotwings le tomaron la delantera. No puedo hablar de Dragon's Lair porque era demasiado pequeño para poderlo jugar, y del trauma que me originó Maniac Mansion por ser horriblemente difícil. Lo que puedo aseverar, es que aún más que esos, los juegos de aventuras gráficas de Lucas me atraían de una forma muy tentadora: Monkey Island 1 y2, pero más especialmente Indiana Jones: The Fate of Atlantis. Aunque aún tendría que esperar a la PSX (PSOne) para poder hablar de mi juego preferido.
 

GTS: ¿Cuál ocupa el puesto?
 

JP:  Metal Gear Solid, el primero, doblado al castellano con un excelente trabajo de Alfonso Vallés. Una revolución en todos los sentidos. Casi a la altura de los que supuso Final Fantasy VII, otro título que justo antes ocupó el escalafón que hoy tiene Solid Snake... ¡Espera! Hay un juego que se me olvida: The Adventures of Alundra, la versión de PSX de Zelda. En lo personal, me gustó bastante más que la saga de Nintendo, pero no quiere decir que sea mejor ni peor, sólo que daba un poco de aire fresco a los personajes y lugares de siempre del título por antonomasia del Action-Rpg.
 

GTS: ¿Se puede decir que FFVII le marcó?
 

JP:  ¡A mí y a todos! Las revistas por aquel entonces estaban apabulladas por el salto de calidad y dimensión. Sus fondos 2D renderizados y 3D de los personajes y para las batallas fue la gran revolución del mundo de los videojuegos. Recuerdo aún el impacto que me causó cuando llegué a casa un sábado tras ir a jugar al baloncesto con mi equipo, antes de pasarme al fútbol. Cuando llegué, mi hermano estaba empezando a jugarlo y me quedé alucinado. Hasta entonces, nunca me había fijado en los RPG y sigo siendo bastante selecto con este género. Legendo of Dragoon y Wild Arms (el primero) fueron las otras dos sagas que llegué a jugar fuera de las creaciones de Squaresoft.
 

GTS: ¿Qué género es su preferido y cuál le disgusta?
 

JP:  Un título de fútbol bien hecho me engancha horas, pero también un juego de acción en tercera persona con opción multijugador, como lor era Metal Gear Online me atrapa mucho. Los plataformas de antaño, hasta la llegada de Crash Bandicoot, con la excepción de la serie Uncharted. Me gustaría hablar de Prince of Persia, pero el 3D le sentó fatal. Actualmente, dónde se ponga un juego de espionaje o aventura gráfica de misterio, casi, casi que puedo apartar el resto.

Me disgusta... los shooters. Tienen buena jugabilidad -no todos-, en ocasiones gráficos muy trabajados, pero suelen acabarse ahí. A mi me gusta sentir que hay un objetivo real, algo que me mueva a continuar lo que hago. Salvo contadas ocasiones, los juegos de este estilo terminan por desmotivarme, sobre todo cuando un ratón y un teclado son más efectivos que un mando de videoconsola.
 

GTS: Penúltima pregunta ¿De las películas sobre videjuegos que han sido estrenadas hasta ahora, cuál es su favorita?
 

JP:  No puedo hablar de favorita, pero sí de cuál me disgusta menos: la adaptación de Prince of Persia. Esto es muy discutible, pero es que comparado con intentos como Final Fantasyo Resident Evil... Es como si los guionistas de la gran pantalla o los directores se hubieran olvidado de cómo hacer su trabajo o en el mejor de los casos, no supieran transmitir esa esencia al séptimo arte. Es que a día de hoy, los videojuegos también son arte, y parece que no caemos en la cuenta de ello.
 

GTS: Y para acabar... ¿Tienes algún mote o sobrenombre por el que te suelen llamar?
 

JP:  La verdad es que no. Realmente me cuesta prestar atención cuando me llaman por mi nombre completo. La gente que me conoce se dirige hacia mí llamándome Juampe (yo lo escribo 'Juanpe', manías de uno aunque atenten contra la RAE). Más habitual se me hizo escuchar Juan o Pedro, especialmente en México, dónde los nombres de más de dos sílabas tienden a contraerse. Desde aquí, un saludo a todos aquellos con los que compartí mi estancia allá gracias a una beca Munde. Son, también, gente maravillosa y a la que espero que le llegue el programa también. 
 

GTS: Muchas gracias por tu tiempo.
 

JP:  ¡De nada! Muchas gracias a vosotros.